Bolaño y Parra, los poetas salvajes: una historia de amistad y admiración
por Roberto Careaga C.
Se vieron por primera vez en 1998 y quedaron flechados. Roberto Bolaño estaba de vuelta en Chile después de 25 años y conocer a Nicanor Parra era conocer al hombre "que había inspirado toda su obra". Pasaron una tarde en Las Cruces y antes de que falleciera el autor de Los detectives salvajes, en 2003, se verían sólo dos veces más. En el intertanto, Bolaño encendió la mecha para la publicación de lasObras completas del antipoeta. Parra encontró a un amigo; Bolaño a algo más: "Un modelo del que nunca se apartará", dice el crítico español Ignacio Echevarría.