Capitalismo de casino y derechos de autor. De David Bowie a Arteria, pasando por Lehman Brothers
Domingo 25 de marzo de 2012. Nodo50
DGA de Comunes, Radio Círculo
Las próximas elecciones en la SGAE vuelven a poner de manifiesto uno de los mayores escándalos en lo que a propiedad intelectual y entidades de gestión se refiere, los llamados derechos anónimos (derechos de obras con autores sin identificar) en la SGAE, con los que se financió la trama inmobiliaria de la red ARTERIA.
[...] Se puede [...] afirmar que el comercio intelectual comparte con la especulación financiera e inmobiliaria rasgos formales de eso que la tradición marxista ha llamado "capital ficticio". En principio, la legitimidad del capital ficticio se basa en las expectativas de que será validado por futuras actividades productivas [...]. Es decir, en los mercados financieros, como en las grandes operaciones inmobiliarias o en el comercio invisible existen royalties que no proceden de la producción sino que constituyen una auténtica usura social [...]. La especulación cultural genera dinero como por arte de magia en la medida en que la sociedad asume como costes los beneficios de los oligopolistas que o bien incrementan el precio de las mercancías en más de un 300% (CD’s) o sencillamente están en condiciones de añadir consumidores sin coste adicional (Internet, televisión vía satélite...); todo ello sin dejar de saquear las inversiones públicas en tecnología, educación, arte o investigación.
César Rendueles - Copiar, robar, mandar.
Con el dinero de los derechos de autor se ha especulado mucho dentro del capitalismo de casino en el que vivimos inmersos. En su magnífico "El Casino que nos gobierna" Juan Hdez. Vigueras nos recordaba el artículo de The Guardian del 2009 "Is the recession David Bowie’s fault?" (¿es culpa de David Bowie la recesión?). Los derechos de autor de 287 canciones de David Bowie (autor entre otros temas de "The man who sold the world") fueron convertidos a bonos que se vendieron a inversores. No fue el único artistas con el que se especuló con su catálogo, también se hizo con gente tan dispar como James Brown o Iron Maiden.