Recordando a Carlos Gardel, a 80 años de su trágica desaparición física.
Autor: Jorge Alberto Dukuen – Coronel Suárez – Argentina.
Carlos Gardel nació el jueves 11 de diciembre de 1890 en Toulouse, Francia. A los 3 años, acompañado por su madre Berta, llegó a la Argentina para establecerse en Buenos Aires. A los 15 años comenzó a actuar como cantante destacándose por el tono inconfundible que su voz le daba a cada tema. En 1917 cantó el tango “Mi noche triste” marcando un hito en la historia de este género. Pronto se convertiría en el máximo referente del siglo XX con temas como “Silencio”, “El día que me quieras”, “Rubias de New York”, “Mi Buenos Aires querido” y “Volver”. Su fama trascendió las fronteras argentinas y se extendió por toda América y el Viejo Continente. Desde muy joven inició giras por España, Francia e Inglaterra, interpretando, como ningún otro, la “canción porteña” por excelencia. En 1931 firmó un contrato con los estudios Paramount para actuar en Hollywood en una serie de películas destinadas al público de habla hispana. Estas fueron “Luces de Buenos Aires”, “Espérame”, “Melodía de Arrabal”, entre otras. Gardel grabó alrededor de 950 canciones, en las cuales dejó marcados los ritmos de cómo cantar el tango: con ironía, con tristeza, con ternura o humor... En pleno apogeo de su carrera, el 24 de junio de 1935 falleció en Medellín, Colombia, en un trágico accidente aéreo. Los restos de “El Zorzal Criollo”, “El Morocho del Abasto” o “El que cada día canta mejor” llegaron a Buenos el 5 de febrero de 1936. “Los pueblos y los tiempos no consentirán jamás el olvido del gran cantor nacional y embajador natural del país...” se escribió por ese entonces. La voz de Gardel fue declarada por la UNESCO (año 2003) Patrimonio Cultural de la Humanidad, junto a Beethoven, Caruso, María Callas, Mozart y una breve lista labrada por el oído del planeta pues cuando éste se silencia logra “retener el sonido de los elegidos”. Gardel y Razzano en el Hotel España de Coronel Suárez... En el álbum municipal de 1910 (Coronel Suárez), recordando viejos comercios, se señala: “El Hotel España reunía todo el confort exigible en la campaña, cómodo, aseado y con un buen restaurante. Puede competir con los mejores de los pueblos de la zona. Tiene capacidad para 80 personas, con comodidades para la familia y está situado en el paraje más céntrico del pueblo frente a la plaza principal. El dueño es el señor Romualdo Martín...”. Dicho Hotel tendría varios dueños y estaba ubicado en la esquina de Mitre y Alsina, donde funcionó la Escribanía de Domingo Nicolás Moccero, pocos años atrás. Pero la frutilla del postre es que en ese lugar cenó y cantó “el mudo”, “el zorzal criollo”, “el morocho del Abasto” o simplemente Carlitos Gardel.... La vuelta... Una crónica del diario “El Fiscal”, del miércoles 12 de abril de 1922, daba cuenta de lo siguiente: “Como estaba anunciado debutó anoche en el teatro Español, el dueto nacional Gardel-Razzano a quienes acompañaban los eximios guitarristas Ricardo y Barbieri. El interés que había despertado en Coronel Suárez el anuncio de la presentación de los simpáticos actores nacionales que tan gratos recuerdos dejaron de su anterior viaje a este pueblo, se puso de manifiesto en el numeroso auditorio que llenó anoche la sala del Español , que evidenció con sus frecuentes muestras de aplausos, la simpatía que despertaban en todas partes Gardel y Razzano. Justo es decirlo, a título muy legitimo. El programa de la velada fue llenado en todas sus partes, siendo igualmente gustadas y aplaudibles las distintas canciones que entonaron con su sin igual maestría los famoso cantores, que sabían llegar hasta el alma de sus oyentes con sólo desplegar sus naturales dones. Aún cuando se había anunciado para esa noche la función de despedida se cree que en virtud del éxito obtenido, y accediendo a las múltiples solicitaciones que se le habían hecho llegar, los señores Gardel y Razzano decidieron prolongar unos días más su estadía en ésta, que El Fiscal les desea muy grata”. Son muchos los artistas, cantantes, elencos teatrales que han visitado la ciudad, la lista es interminable y un día podremos recordarla pero, hoy, quisiera que los vecinos piensen por unos segundos lo que significó y significa que el duo Gardel-Razzano y sus ilustres acompañantes cantaran aquí y pasearan por nuestras calles; ellos que conquistaron toda América, y gran parte de Europa, con mucha repercusión en París y otros escenarios mundiales. Los orígenes de donde nació Gardel se lo pelean uruguayos y franceses, incluso se dice que hubo dos chicos, pero para los argentinos que lo recordamos hoy con nostalgiosa alegría, Gardel es argentino y es mundial, estamos orgullosos y sí que podemos decir que Carlitos cada día canta mejor...