El autor se sumerge en un universo propio, un espacio opresivo lírico donde la nada, el vacío, la tierra sin final, el crepúsculo roto.. arrinconan cual quier atisbo de vida gozosa. El poeta ha perfilado un poemario singular y desgarrador a través de un conjunto de temáticas existenciales donde predominan soportes violentos, tramas opresoras, desamor, angustia existencial y zozobra personal cuyos espacios versales se ven continuamente atravesados por escenografías oníricas e inquietantes en algunos casos de ascendencia surrealista, donde se entrecruzan horizontes reales y alucinógenos en una obra donde, como telón de fondo, se alza la angustia, el sufrimiento y la muerte ante realidades humanas e inhóspitas cargadas de adversidad.