Gabriel Soley y Julián Brossa, ambos directores adjuntos del Banco de Créditos e Inversiones, aspiran a ser nombrados directores generales cuando se produzca la jubilación de la actual directora, la señora Paula Subirats. El magnate ruso, Andrei Ivanovich, un promotor de viviendas de recreo y campos de golf en la playa de Mojácar (Almería), se erige como el tercero en discordia. En la presente novela se narra una trama de ambiciones desmesuradas, rivalidades, traiciones y erotismo, envuelta en el marco histórico de la crisis bancaria del 2008. Una novela amena en la que no dejan de ocurrir cosas y en la que cada página es un aviso —o una amenaza— de lo que puede ocurrir en las páginas siguientes.