“Duelo” es la expansión sentimental en verso de esta palabra en sus tres acepciones: la expresión de los sentimientos comunes durante los años que siguen a la muerte del ser amado, el dolor en primera persona y el combate interior entre la necesidad y la desgana de vivir tras la pérdida. No pretende ser una ayuda -muy al contrario, expresa el dolor sin límites, fases, aceptación ni recetas-, pero intenta sobrepasar la emoción personal para llegar a los sentimientos universales del desgarro y la conciencia de que somos lo que nos falta.