CONFLUENCIAS NOCTURNAS nace de la inspiración y el desatino de la noche, en un reiterado deambular por sus matices y sus tiempos que marcan a ritmo las caras y contracaras del amor. En el trayecto, se desliza la poesía, recorriendo cuatro formas temporales de la noche -el atardecer, la medianoche, las horas frías y el alba- en correspondencia con los tiempos y estados del amor –la ilusión, la pasión, la desolación y la esperanza-. He aquí, una secuencia de poemas de amor, como tantos poetas han escrito en la historia y en la noche. En diálogo constante con las experiencias propias de quien se atreve a entrar en la obra, lo que busca su autora es la posibilidad de sorprender al lector con imágenes inéditas e intensidad manifiesta en cada verso, en cada palabra… con el único e irrefutable propósito de invitarlo a volar.