Los ADOS no son cantados ni soñados, son especialmente apuntados de cómo me los he imaginado. Ados que no son hadas, Ados que son a todos. Ados se me volvió soda efervescente de letras em-burbujadas explotando en palabras. No soy escritora, pero escribo. Mucho menos poeta, aunque las palabras me llegan y se me salen en versos sin poderlo evitar. En este libro encontraras algunas de mis palabras dispersas: agrupadas. Sea prosa, sea verso, sea poema, lo que sea: ¡que a palabras sea! Está aquí dentro para que lo leas y no te digo más para hacértelo de sorpresa.