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Fan-fiction


 

Fan-fiction

 

fan fiction

 

El término fanfic o fan-fiction procede de la lengua anglosajona y puede traducirse como “ficciones de fans” y, como su nombre indica, se refiere a lectores, fans de una obra literaria que deciden escribir otra obra tomando la inicial como punto de partida. El término que se usa en español es el de Ficción-manía.

Aunque ha tenido un gran auge en internet, lo cierto es que ya en 1930 existían escritores amateurs de que publicaban ciencia ficción en un fanzine o ficción creada por fans para fans, aunque en la actualidad el término se emplea solo para los fanfics que, desde los años 70, publicaron fanzines con el universo de Star Trek. De hecho, la literatura clásica está plagada de continuaciones y adaptaciones, tales como las sagas homéricas o las revisiones del mito de Edipo por parte de Eurípides, Sófocles y Esquilo, y el fanfiction puede considerarse como la adaptación contemporánea del género literario del pastiche.

Un dato curioso es que desde los inicios la mayoría de fandoms son mujeres. Algunos han tenido tanto éxito, como Cassandra Clare y E.L. James que fueron publicadas por editoriales. En español, la escritora chilena Francisca Solar publicó su fanfic de Harry Potter, El ocaso de los altos elfos, en 2003, y tuvo millones de visitas.

Los escritores de fanfiction con frecuencia han sido acusados de “plagio”, aunque la mayoría de los autores posee grupos que aprecian su trabajo.
En 1998, se creó la página web FanFiction.net, dedicada exclusivamente a la producción y distribución de fanfiction. Kindle Worlds, derivada de Amazon, que fue creada en 2013 para legitimar el género.

Aunque los fanfiction publican de forma amateur y sin ánimo de lucro, también es cierto que las leyes de copyright indican que la violación de derechos se produce incluso si no hay un uso mercantil.

Sin embargo, no se puede negar que el fenómeno ayuda a mantener el interés de los fans, algunos autores lo entienden en este sentido, aunque también están los que opinan lo contrario, es el caso de Anne Rice, que impiden cualquier fanfic de sus personajes.